El Torelló Collection 2010, el
espumoso más exclusivo de la histórica bodega del Penedès, ha obtenido 98 puntos
– la máxima puntuación – en la conocida guía de vinos de La Semana
Vitivinícola. Además, el panel de cata de la guía ha escogido al Torelló
Collection 2010 como espumoso de su Top 2021. La Semana Vitivinícola, revista
técnica del sector desde 1945, acaba de presentar la 11ª edición de su guía de
vinos y aceites, tras haber catado 1717 vinos.
El Torelló Collection 2010 es un
espumoso de más de 10 años de crianza, elaborado con las variedades xarel·lo
(37%), macabeo (36%) y parellada (27%) de viñedos propios de la finca Can
Martí, ubicada en Gelida (Alt Penedès). Este espumoso es un brut nature – sin
adición de azúcares ni ningún tipo de licor – y es descrito por la guía como un
vino “fragante y maduro”, “cremoso en boca, estructurado, equilibrado y muy
largo”.
Torelló Collection 2010, 98 punts en Semana Vitivinícola
El Torelló Collection 2010, l’escumós més exclusiu del celler ha obtingut 98 punts – la màxima puntuació – a la coneguda guia de vins de la Semana Vitivinícola. A més, el panell de tast de la guia ha triat al Torelló Collection 2010 com a escumós del seu Top 2021. La Semana Vitivinícola, revista tècnica del sector des de 1945, acaba de presentar la 11a edició de la seva guia de vins i olis, després d’haver catat 1717 vins.
El Torelló Collection 2010 és un escumós de més de 10 anys de criança, elaborat amb les varietats xarel·lo (37%), macabeu (36%) i parellada (27%) de vinyes pròpies de la finca Can Martí, situada a Gelida (Alt Penedès). Aquest escumós és un brut nature – sense addició de sucres ni cap mena de licor – i és descrit per la guia com un vi “fragant i madur”, “cremós en boca, estructurat, equilibrat i molt llarg”.
Al juny vam inaugurar un nou espai gastronòmic a l’aire lliure a la finca Can Martí, envoltat de vinyes, davant la masia medieval de la família: La Barbequiú!
La Barbequiú Torelló compta
amb una àmplia terrassa on els visitants del celler poden gaudir d’un suculent
menú barbacoa, amb un toc gourmet, acompanyat dels vins DO Penedès i escumosos
Corpinnat de llarga criança de la casa.
L’experiencia comença amb una
visita a la masia familiar, celler i caves subterrànies, on s’ensenya i
s’explica la història de Torelló i el procés d’elaboració de vins i escumosos
Corpinnat. En acabar, es passa a l’espai Barbequiú, on es gaudeix d’un menú
barbacoa al més pur estil Torelló. L’ambientació musical acabarà d’arrodonir
una experiència enoturística, que se sap com comença, però mai com acaba.
La Barbequiú Torelló va arrencar al mes de juny amb l’organització de quatre dinars tots els dissabtes i degut l’èxit, tornarem al setembre, amb tres amb tres jornades més.
Per a reservar l’experiència, s’ha de contactar via mail o telèfon: visites@torello.es – 93 891 07 93 – 616 31 07 22
La Barbequiú Torelló
En junio inauguramos un nuevo espacio gastronómico al aire libre en la inca Can Martí, rodeado de viñas, ante la masía medieval de la familia: La Barbequiú!
La Barbequiú Torelló
cuenta con una amplia terraza donde los visitantes de la bodega pueden
disfrutar de un suculento menú barbacoa, con un toque gourmet, acompañado de
los vinos DO Penedès y espumosos Corpinnat de larga crianza de
la casa.
La experiencia empieza
con una visita a la masía familiar, bodega y cavas subterráneas, donde se
enseña y se explica la historia de Torelló y el proceso de elaboración de vinos
y espumosos Corpinnat. En acabar se pasa al espacio Barbequiú,
donde se disfruta de un menú barbacoa al más puro estilo Torelló. La
ambientación musical acaba de redondear una experiencia enoturística, que
se sabe como empieza, pero nunca como acaba.
La Barbequiú Torelló arrancó en el mes de junio con la organización de cuatro comidas todos los sábados y dado el éxito, volveremos en septiembre con tres jornadas más.
Para reservar la experiencia, se debe contactar vía mail o teléfono: visites@torello.es – 93 891 07 93 – 616 31 07 22
The Barbequiú Torelló
In june we opened a new open-air gastronomic space on the Can Martí estate, surrounded by vineyards, in front of the family’s medieval farmhouse: The Barbequiú!
The Barbequiú Torelló has a large terrace where
visitors to the winery can enjoy a succulent barbecue menu, with a gourmet
touch, accompanied by the house’s DO Penedès wines and long-aged Corpinnat
sparkling wines.
The experience begins with a visit to the family
farmhouse, cellar and underground caves, where the history of Torelló and the
process of making Corpinnat wines and sparkling wines are explained.
Afterwards, we move on to the Barbequiú area, where we enjoy a barbecue menu in
the purest Torelló style. The musical ambience rounds off a wine tourism
experience that you know how it begins, but never how it ends.
The Barbequiú Torelló started in June with the organization of four meals on Saturdays, and because of it success, we are coming back in September, with three more days.
To book the experience, contact via email or
telephone: visites@torello.es – 93 891 07 93 – 616 31 07 22
Abans que s’acabi l’hivern, al
mes de febrer, es produeix a la vinya un dels seus moments més màgics, el plor
dels ceps. La temperatura del sól comença a pujar, la pressió radicular
augmenta i la circulació de la saba de la planta comença a activar-se de manera
ascendent. Després de la poda d’hivern, aquesta comença a fluir pel cep i
degota per les branques arribant a les seves ferides, per a curar les
cicatrius. Un moment poètic que anuncia que s’acosta la primavera.
I amb la primavera, la vinya torna a la vida. Al febrer es produïa el plor a les vinyes i la planta es reactivava després de la letargia hivernal. I ara entre els mesos de març i abril arriba la brotació. El cicle vegetatiu de les vinyes canvia molt depenent de la varietat i les característiques de la zona. En el nostre cas, en algunes de les parcel·les de xarel·lo i chardonnay, podem veure vinyes brotant i en la seva màxima esplendor. El paisatge comença a tenyir-se de verd.
El lloro y brotación de la vinya en Can Martí
Antes de que se acabe el
invierno, en el mes de febrero, se produce en la viña uno de sus momentos más
mágicos, el llanto de las vides. La temperatura del suelo empieza a subir, la
presión radicular aumenta y la circulación de la savia de la planta empieza a
activarse de manera ascendente. Después de la poda de invierno, ésta empieza a
fluir por la cepa y gotea por sus ramas llegando a las heridas, para curar las
cicatrices. Un momento poético que anuncia que se acerca la primavera.
Y con la primavera, la viña vuelve a la vida. En febrero se producía el lloro en las vides y la planta se reactivaba tras el letargo invernal. Y ahora entre los meses de marzo y abril llega la brotación. El ciclo vegetativo de las viñas cambia mucho dependiendo de la variedad y las características de la zona. En nuestro caso, en alguna de las parcelas de xarel·lo y chardonnay, podemos ver viñas brotando y en su máximo esplendor. El paisaje comienza a teñirse de verde.
The weepeing and vineyards budbreaking at Can Martí
Before the end of winter, in February, the
vines experience one of their most magical moments, the weeping of the vines.
The soil temperature begins to rise, root pressure increases and the plant’s
sap circulation begins to activate upwards. After the winter pruning, the sap
begins to flow through the vine and drips down its branches to reach the
wounds, to heal the scars. A poetic moment that announces the approach of
spring.
And with spring, the vines come back to life. In February, the vines wept and the plant was reactivated after its winter lethargy. And now, between the months of March and April, budding begins. The vegetative cycle of the vines changes depending on the variety and the characteristics of the area. In our case, in some of the plots of xarel·lo and chardonnay, we can see the vines budding and in their maximum splendour. The landscape begins to turn green.
Estos días en Torelló estamos
haciendo ensayos y catas de los vinos que tenemos criando en barricas en la
bodega. Una vez tenemos los vinos de la cosecha 2020, los traspasamos a las
barricas para que hagan la fermentación allí o para que inicien el proceso de
envejecimiento en madera. En Torelló trabajamos con diferentes tipos de
barricas, para mirar de otorgar a los vinos diferentes aromas y
envejecimientos. Cada madera es diferente y así también lo será la impronta que
ésta deja en el vino. Esta semana, el equipo de enología se reúne en la sala de
catas, donde se dedica a probar cerca de unos treinta vinos con paso por distintas
barricas. En Torelló utilizamos, mayoritariamente, tres tipos:
Roble francés (Allier, Vosgues, centro de Francia y Bertranges). Crianza delicada y sutil, debido a la gran densidad de la madera y a la finura de sus poros. Es ideal para crianzas largas.
Barricas de acacia, esta madera es muy porosa, más que la de roble americano y menos tánica y aporta aromas cítricos al vino. Utilizadas solo para el vino blanco (xarel·lo).
Roble americano, en nuestro caso, solo en un pequeño porcentaje. Es más tánico, pero más aromático y de poros más grandes. Aporta toques de coco y vainilla, entre otros.
El tiempo de tueste y la temperatura a la que se somete la madera en la construcción de las barricas le deja una impronta importante y depende de la personalidad de cada bodega utilizar un tipo u otro. En Torelló utilizamos mayoritariamente barricas con tostado ligero y ligero medio. Nuestro estilo nos lleva a hacer vinos donde el paso por madera aporte cuerpo y volumen al vino, pero sin tapar sus aromas florales y frutales primarios.
En nuestro vino
blanco Crisalys – un 100% xarel·lo – parte del vino tiene una crianza
en barrica de roble francés, durante 4/6 meses. En el caso del
Gran Crisalys, de cupage xarel·lo y chardonnay,
el xarel·lo cría en barrica de segundo y tercer año y la chardonnay,
en barrica nueva, durante cuatro meses aproximadamente.
En el caso de
nuestro Raimonda, al tratarse de un vino tinto con crianza, le damos más
tiempo de envejecimiento en madera. Así conseguimos darle el cuerpo, textura y
aromas que lo caracterizan. Después de pasar 18 meses en madera, este vino se
enriquece con toques balsámicos y especiados, como el tabaco, el
clavo o la vainilla.
Estos días estamos comprobando
como va evolucionando la crianza de las diferentes variedades en las diferentes
barricas y probando los matices que las maderas y el tiempo van otorgando a
cada vino. Con las catas iremos seleccionando y eligiendo qué barricas nos
gustan más y así conformaremos los cupages de los vinos que sacaremos al
mercado en los próximos meses.
Tast de vins amb pas per diferents bótes
Aquests dies a Torelló estem fent assajos i tastos dels vins que tenim criant en barriques al celler. Un cop tenim els vins de la collita 2020, els traspassem a les bótes per a que hi facin la fermentació allà o per a que iniciïn el procés d’envelliment en bóta de fusta. A Torelló treballem amb diferents bótes, per mirar d’atorgar als vins diferents sabors, aromes i envelliments. Cada fusta és diferent i així també ho serà l’empremta que aquesta deixa en el vi. Aquesta setmana l’equip d’enologia es reuneix a la sala de tastos, on es dedica a tastar prop d’una trentena de diferents vins amb pas per diferents bótes. A Torelló utilitzem, majoritàriament, de tres tipus:
Roure francès (Allier, Vosgues, centre de França i Bertranges). Criança delicada i subtil, a causa de la gran densitat de la fusta i a la finesa dels seus porus. És ideal per a criances llargues.
Barriques d’acàcia, aquesta fusta és molt porosa, més que la de roure americà i menys tànnica i aporta aromes cítriques al vi. Utilitzades només pel vi blanc (xarel·lo).
Roure americà, en el nostre cas, només en un petit percentatge. És més tànnic, però més aromàtic i de porus grans. Aporta tocs de coco i vainilla, entre d’altres.
El temps de torrat i la temperatura
a la qual se sotmet la fusta en la construcció de les barriques li deixa una
empremta important i depèn de la personalitat de cada celler utilitzar-ne un
tipus o un altre. A Torelló utilitzem majoritàriament barriques amb torrat
lleuger i lleuger mig. El nostre estil ens porta a fer vins on el pas per fusta
aporti cos i volum al vi, però sense tapar les seves aromes florals i fruitals
primàries.
El nostre vi blanc Crisalys, un
100% xarel·lo, part del vi té una criança en barrica de roure francés, durant quatre
o sis mesos. En el cas del Gran Crisalys, de cupatge xarel·lo i chardonnay, el xarel·lo
cria en barrica de segon i tercer any i la chardonnay, en barrica nova, durant
quatre mesos, aproximadament.
En el cas del nostre Raimonda, al
tractar-se d’un vi negre amb criança, li donem més temps d’envelliment en bóta.
Així aconseguim donar-li el cos, textura i aromes que el caracteritzen. Després
de passar 18 mesos en fusta, aquest vi s’enriqueix amb tocs balsàmics i
especiats, com el tabac, el clau o la vainilla.
Aquests dies estem comprovant com va evolucionant la criança de les diferents varietats en les diverses bótes i provant els matisos que les fustes i el temps van atorgant a cada vi. Amb els tastos anirem seleccionant i triant quines barriques ens agraden més i així conformarem els cupatges dels vins que traurem al mercat en els pròxims mesos.
Wines with different barrels tasting
These days at Torelló we are doing tastings of
the wines that we have aging in barrels in the winery. Once we have the 2020
vintage wines, we transfer them to the barrels to ferment there or to begin the
aging process in wood. In Torelló we work with different kinds of barrels, to
try to give the wines different aromas and aging. Each wood is different and so
will the imprint it leaves on the wine. This week, the oenology team met in the
tasting room, where they are dedicated to tasting about thirty wines that have
passed through different barrels. At Torelló we use, mainly, three barrels types:
French oak (Allier, Vosgues, central France and Bertranges). Delicate and subtle aging, due to the great density of the wood and the fineness of its pores. It is ideal for long aging.
Acacia barrels, this wood is very porous, more than American oak and less tannic and provides citrus aromas to the wine. Used only for white wine (xarel·lo).
American oak, in our case, only in a small percentage. It is more tannic, but more aromatic and with larger pores. It adds touches of coconut and vanilla, among others.
The roasting time and the temperature to which
the wood is subjected in the construction of the barrels leaves an important
mark on it and it depends on the personality of each winery to use one type or
another. In Torelló we mainly use light and medium toasted barrels. Our style
leads us to make wines where the passage through wood adds body and volume to
the wine, but without obscuring its primary floral and fruity aromas.
In Crisalys white wine – 100% xarel·lo – part of the wine is aged in French oak barrels for 4/6 months. In the case of Gran Crisalys, made from xarel·lo and chardonnay, the xarel·lo is aged in second and third year barrels and the chardonnay, in new barrels, for approximately four months.
In the case of Raimonda, as it is an aged red
wine, we give it more time to age in wood. Thus, we manage to give it the body,
texture and aromas that characterize it. After spending 18 months in wood, this
wine is enriched with balsamic and spicy touches, such as tobacco, clove or
vanilla.
These days we are checking how the aging of the
different varieties is evolving in the different barrels and testing the
nuances that the woods and time give each wine. With the tastings we will
select and choose which barrels we like the most and thus we will design the
cupages of the wines that we leave on the market in the coming months.
¡Vuelve el lunes de súper puntuaciones! Hoy de la mano de la guía Vivir el Vino, tras seleccionar y catar a ciegas cerca de 1.600 muestras.
Torelló 225, 2016: 96 puntos
Gran Torelló, 2013: 93 puntos
Tradicional Brut Nature: 2014: 93 puntos
Gran Crisalys, 2018: 92 puntos
Malvarel·lo, 2019: 90 puntos
Del mejor puntuado, nuestro Torelló 225, destacan «su
alta intensidad, con notas de buena crianza y levaduras[…] En boca es
atractivo, amplio en el paso y con gran estructura y potencia».